¿Has notado que los trabajadores de tu empresa se muestran descontentos, irritables, y desmotivados?
¿Tienen constantes conflictos entre compañeros y con Jefes?
¿Hay altos niveles de ausentismo?
¿Ha disminuido la productividad, la calidad en la atención y esto produce sobrecarga para otros trabajadores?
Si respondiste si a una o todas las preguntas anteriores, es altamente recomendable que puedas realizar un análisis de los factores de riesgo psicosocial. Pero, ¿a qué se refiere o por qué es importante llevarlo a cabo?
La Secretaría del Trabajo y Previsión Social, emitió la Norma Oficial Mexicana NOM-035-STPS-2018, Factores de riesgo psicosocial en el trabajo-Identificación, análisis y prevención, publicada en el Diario Oficial de la Federación el 23 de octubre de 2018, que tiene por objetivo establecer los elementos para identificar, analizar y prevenir los factores de riesgo psicosocial, así como promover un entorno organizacional favorable en los centros de trabajo.
Aquel en el que se promueve el sentido de pertenencia de los trabajadores a la empresa; la formación para la adecuada realización de las tareas encomendadas; la definición precisa de responsabilidades para los trabajadores del centro de trabajo; la participación proactiva y comunicación entre trabajadores; la distribución adecuada de cargas de trabajo, con jornadas de trabajo regulares conforme a la Ley Federal del Trabajo, así como la evaluación y el reconocimiento del desempeño.
En este aspecto se evalúan las condiciones en el ambiente de trabajo; las cargas de trabajo; la falta de control sobre el trabajo; las jornadas de trabajo y rotación de turnos; y la interferencia en la relación trabajo-familia.
También se identifica tipo de liderazgo y relaciones negativas, así como violencia laboral en sus diversas demostraciones: Acoso, hostigamiento y malos tratos.
Aquellos que pueden provocar trastornos de ansiedad, no orgánicos del ciclo sueño-vigilia y de estrés grave y de adaptación, derivado de la naturaleza de las funciones del puesto de trabajo, el tipo de jornada de trabajo y la exposición a acontecimientos traumáticos severos o a actos de violencia laboral al trabajador, por el trabajo desarrollado.
En este rubro se evalúa el sentido de pertenencia de los trabajadores a la empresa; la formación para la adecuada realización de las tareas encomendadas; la definición precisa de responsabilidades para los trabajadores; la participación proactiva y comunicación entre el patrón, sus representantes y los trabajadores; la distribución adecuada de cargas de trabajo con jornadas laborales regulares y el reconocimiento del desempeño.
Las acciones se determinan una vez realizado el análisis, y según aplique, se puede intervenir en los siguientes niveles:
PRIMER NIVEL
Las acciones se centran en el plano organizacional e implican actuar sobre la política de prevención de riesgos psicosociales del centro de trabajo, la organización del trabajo, las acciones o medios para: disminuir los efectos de los factores de riesgo psicosocial, prevenir la violencia laboral y propiciar el entorno organizacional favorable.
SEGUNDO NIVEL
Las acciones se orientan al plano grupal e implica actuar en la interrelación de los trabajadores o grupos de ellos y la organización del trabajo; su actuación se centra en el tiempo de trabajo, el comportamiento y las interacciones personales, se basan en proporcionar información al trabajador, así como en la sensibilización, (contempla temas como: manejo de conflictos, trabajo en equipo, orientación a resultados, liderazgo, comunicación asertiva, administración del tiempo de trabajo, entre otros), y reforzar el apoyo social.
TERCER NIVEL
Las acciones se enfocan al plano individual; es decir, se desarrolla cuando se comprueba que existen signos y/o síntomas que denotan alteraciones en la salud, se incluyen intervenciones de tipo clínico o terapéutico. Las intervenciones de tercer nivel que sean de tipo clínico o terapéutico deberán ser realizadas invariablemente por un médico, psicólogo o psiquiatra según corresponda.
• Entorno organizacional favorable.
• Calidad en el servicio.
• Compromiso y autogestión del trabajador al desempeñar funciones.
• Aumento en la productividad.
• Proyecta la imagen como centro de trabajo responsable y cuidadoso de su personal.
• Disminuye el ausentismo.
• Menos quejas de pacientes, familiares u otros trabajadores a través del fortalecimiento de estándares en el servicio.
• Cero tolerancia a hostigamiento y acoso laboral y/o sexual.
Si bien la Norma no establece como obligatorio realizar una evaluación personalizada por trabajador, si recomienda incluir atenciones grupales e individuales de tipo clínico y terapeútico; nosotros te ofrecemos realizar estas evaluaciones, para detectar e intervenir en casos específicos; por lo que además de evaluar los puntos que la NOM exige, podemos:
• Utilizar instrumentos para realizar una evaluación psicológica de los trabajadores.
• Aplicar inventarios, en casos seleccionados, para identificar trastornos mentales.
• Conocer variables psicológicas internas al individuo tales como: actitud, valores, personalidad, etc.
• Medir el estrés en los trabajadores.
Siempre, bajo estrictos parámetros de confidencialidad y resguardando la integridad del trabajador; con el objetivo de realizar intervenciones puntuales, así como ofrecer un plan de trabajo y tratamiento personalizado para tu empresa al 100%.
Los costos variarán dependiendo la cantidad de trabajadores a evaluar, pues la NOM establece diferentes pautas según número de trabajadores por centro laboral.
Puedes ponerte en contacto a través de los siguientes botones, para solicitar mayor información.